Schafrik habló de las estructuras presupuestarias y su dimensión social

Por el 27 de agosto de 2020

Continúa el ciclo de capacitación virtual organizado por el Ministerio Público Fiscal porteño

Con más de 300 asistentes que siguieron las exposiciones, se desarrolló el miércoles 26 a partir de las 15 y con la transmisión en directo en el canal oficial de YouTube, la cuarta jornada de análisis; en esta oportunidad bajo el título: «Derechos Humanos y sus dimensiones económicas, sociales, culturales y ambientales».

La vicepresidenta segunda del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires e integrante de la Sala I de la Cámara de Apelaciones en lo Contencioso Administrativo y Tributario, Fabiana Schafrik, participó del encuentro en calidad de oradora, e inició su exposición agradeciendo a las autoridades del Ministerio Público Fiscal por la convocatoria.

Comenzó aclarando que más allá de la idea del encuentro, acerca de tratar y relacionar el presupuesto con los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales, no podía empezar a abordar el tema sin tener en cuenta el contexto de «la crisis mundial del Covid«. Al respecto, señaló que «impacta en nuestras sociedades y en la región latinoamericana con sus particularidades», y añadió que «la población vulnerable hoy es más vulnerable aún, y se suman otros vulnerables, como consecuencia de este flagelo que tenemos que afrontar todos». «Los derechos humanos de base universal e interdependiente, hoy no son de acceso a muchos de nuestros habitantes de la región», alertó.

Reconoció que ese contexto iba a condicionar su mirada en la charla e indicó que «esto uno lo ve en cada ámbito donde se desarrolla»: «A nosotros nos toca el ámbito de la Ciudad y esto tiene reflejos seguramente en diferentes jurisdicciones donde las peticiones de justicia de los vulnerables pasan por los conflictos a los que los enfrenta esta pandemia». Entonces dijo que «como los principios del derecho internacional de los derechos humanos hoy por hoy están condicionados, no se puede hablar de progresividad ni de un avance en ellos; cuando están hoy más implicados y puestos en peligro que nunca». Añadió que creía que el desafío hoy, en este contexto, es más evidente en torno a la relación que hay entre lo económico y los derechos.

Abordó luego, la historia de nuestro desarrollo constitucional que para la magistrada «estuvo signado por épocas». Acerca de la Constitución del 53 dijo que «parecía tener una aparente desconexión o en realidad era parte de su idea con los derechos y el sistema económico que se trazó». Posteriormente, completó apuntando que «a lo largo del tiempo se sumaron derechos sociales, y quizás esta comunión entre lo económico y los derechos empieza a verse más con la reforma del 94, con la constitucionalización de algunos instrumentos internacionales de Derechos Humanos y el modo de alcanzar ese nivel constitucional por parte de otros instrumentos internacionales de Derechos Humanos». Narró pormenorizadamente algunos de los avances conceptuales que se introdujeron con la reforma del 94 y luego, en la Constitución porteña.

Allí enumeró esos avances de la Carta Magna local, a la que caracterizó como «una estructura más moderna». Y habló acerca de los derechos y garantías, y sus especificaciones en torno a la salud, la educación, la vivienda. Puntualizó en que «se habla de resolver progresivamente el déficit habitacional de infraestructura y de servicios dando prioridad a las personas de los sectores de pobreza crítica«. Y agregó acerca de estos derechos que «es un entramado constitucional donde recalar en esta relación de los recursos, este diálogo entre los recursos y los derechos desde el entramado constitucional, -dijo- es constante».

Acerca de la presencia del sistema internacional de los derechos humanos en nuestro sistema, remarcó que «en esta dimensión prestacional de derechos, el resultado de lo que todos los derechos tienen es una necesidad de ser costeados económicamente por el Estado y además que estos derechos que eran interpretados como derechos individuales, se pueden interpretar también con sentido social«. Ahondó citando jurisprudencia de la Corte sobre el derecho a la salud, y en la Ciudad, recordó resoluciones de la Sala I del fuero Contencioso sobre el derecho a la educación en un aspecto social. Allí subrayó que «si tenemos todo ese bagaje para poder interpretar, debemos tener el modo de hacerlo efectivo, y el presupuesto -ahondó- es un aspecto para ayudar a la efectividad de esto».

En el análisis de lo eminentemente referido al circuito presupuestario, señaló que los aspectos importantes para tener en cuenta son «la transparencia, la claridad de las normas, la sensibilidad a los datos y la participación». Celebró la incorporación en el orden nacional de la Oficina de Presupuesto que asesora en el Congreso; y especificó que «empezó a sumar la mirada que debe tener lo presupuestario con los derechos humanos y entre sus funciones, promover la incorporación del presupuesto con perspectiva de género«.

Finalmente, señaló que «hoy por hoy tenemos un gran desafío por delante, que es ante este contexto tan grave que vivimos, que pueda cambiar nuestra mirada sobre los derechos y poder empezar a construir diálogo entre diferentes estructuras para poder en algún momento hacerlos realidad».

En diálogo con iJudicial, Schafrik señaló la importancia de estos espacios de reflexión, como el que organiza el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires, y destacó que «permiten el abordaje de temáticas jurídicas a través de una mirada en perspectiva económica, social, cultural y ambiental y, a la vez, hacen posible un fructífero intercambio con expositores nacionales e internacionales, que expanden sus contenidos al conjunto de operadores judiciales y al público general de manera abierta y gratuita, dando lugar a una rica experiencia democratizadora a través de las nuevas tecnologías».-