JusLab: Periodistas y magistrados dialogaron en la tercera jornada

Por el 19 de julio de 2019

El encuentro que convocó la Secretaría de Planificación del Consejo de la Magistratura porteño se desarrolló en la Sala de Audiencias de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires

La jueza Lorena Tula del Moral junto a la fiscal Daniela Dupuy

El Laboratorio de Justicia Abierta e Innovación continúa su trabajo que consiste en abrir las puertas del Poder Judicial local. El jueves 18 a partir de las 15 horas, realizó una jornada para intercambiar experiencias sobre las nuevas estrategias y los paradigmas de la comunicación.

Participaron la titular del Juzgado n.° 13 en lo Penal, Contravencional y de Faltas, Lorena Tula del Moral, quien viene llevando adelante una tarea innovadora de apertura de datos desde hace dos años. Junto a ella, el titular del Juzgado n.° 18 en lo Contencioso Administrativo y Tributario, Marcelo López Alfonsín; y la titular de la Fiscalía n.° 12 en lo Penal, Contravencional y de Faltas, Daniela Dupuy. Participaron además y se sumaron al debate, la titular del Juzgado n.° 28 en lo Penal, Contravencional y de Faltas, Julia Correa; y el titular del Juzgado n.° 13 en lo Contencioso Administrativo y Tributario, Guillermo Scheibler.

A sala llena, la actividad contó con la presencia del consejero porteño, Raul M. Alfonsín y del subsecretario de Justicia del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, Hernán Najenson. La charla fue presentada por el secretario de Planificación, Mariano Heller; y coordinada por el Jefe de Información Judicial (iJudicial), Rodrigo Estévez Andrade.-

Esta tercera cita estuvo presidida por los periodistas Omar Lavieri (Infobae) y Andrés Fidanza (CNN Radio y Perfil), y en su doble condición de comunicadores y abogados también dialogaron Sergio Mohadeb (Derecho en Zapatillas), y Matías Werner (Diario Judicial).

Matías Werner (Diario Judicial), Omar Lavieri (Infobae), Andrés Fidanza (CNN Radio y Perfil), y Sergio Mohadeb (Derecho en Zapatillas)

Lavieri recordó sus primeros pasos en el diario Clarín, a comienzos de los 90, con las indagatorias de los secuestradores del entonces empresario Mauricio Macri. «Había sucedido algo muy importante en la historia del periodismo moderno, que es que Román Lejtman en Página/12 había mostrado las maniobras en el expediente del caso Yoma», rememoró, y aseguró además que «esa fue la fecha de defunción de lo que había sido la historia de la relación previa entre los medios y la justicia federal». Hasta entonces, advirtió «los jueces decían ‘nosotros hablamos por nuestros fallos’«.

Para Werner haber llegado al periodismo en la era digital simplificó mucho la inserción en el trabajo. Sin embargo, reconoció que «surgieron nuevos problemas», uno de ellos el de la llegada del «lenguaje claro». Relató: «Hay una mayor horizontalidad en ese sentido, porque hay un grave problema aún en la comunicación».

Cuando le tocó el turno a Mohadeb, además de agradecer la invitación, recordó que en su época de estudiante de la Facultad se preguntaba: «¿Para quién hablan los jueces?». «Es fantástico el avance producto de la tecnología, que hace que la información pública, sea pública», destacó, y concluyó que el desafío es «no perder calidad y a la vez comunicar bien».

Al cierre de la mesa de periodistas, Fidanza habló de los nuevos diálogos que se dan tras bambalinas y también vía WhatsApp. «Hay una fuerte judicialización de la política», alertó y reconoció que este fenómeno hoy se ve reflejado en la organización de los diarios, y en la incorporación de especialistas en cuestiones judiciales. Un signo de este tiempo. «La justicia se vuelve un lenguaje de derechos, en el sentido de difundir fallos que tienen que ver con la vida cotidiana, acceso a la vivienda, obra social, fallos referidos al medio ambiente», analizó y destacó el valor que tiene la tarea de la comunicación desde la propia justicia. «Impacta de forma mucho más directa en la vida de la gente», concluyó.

El juez Marcelo López Alfonsín

A continuación, fue el turno de los magistrados y las magistradas; Tula del Moral señaló que «la idea es que la justicia sea abierta y que tenga contacto directo con el ciudadano, más allá de que los periodistas puedan traducir y transmitir la información de las resoluciones». Además destacó que «el juez ya no habla solo con la sentencia», y recordó que «en la actualidad, en el Poder Judicial de la Ciudad, hay dos juzgados que tienen como herramienta de comunicación una cuenta de twitter donde muestran su gestión, su agenda y sus estadísticas, entre otras cosas”.

Sentada a su lado habló la fiscal especializada en Delitos Informáticos, Daniela Dupuy, quien destacó la importancia de la comunicación en los delitos que investiga. Y abogó porque sirva para alertar a la sociedad en materia de prevención, especialmente en aquellos cometidos a través de internet. “Es importante que la ciudadanía esté bien informada para que nos ayude de esta manera a que estos delitos no se cometan”, advirtió. Y por último, aseguró que en el Poder Judicial de la Ciudad, se trabaja desformalizadamente. «No hay expedientes, hay personas”, concluyó.

Posteriormente, Lopez Alfonsín reivindicó su condición de docente y recordó sus tiempos como abogado litigante. Confesó que una de las cuestiones que lo desafiaban por aquellos años al estar del otro lado del mostrador y que lo siguen desafiando «de este lado del mostrador», es la frase «los jueces hablan solamente con su sentencia”. Categórico, respondió: «No lo entiendo, disculpenme pero no lo termino de entender. Yo creo que los jueces hablamos por nuestra conducta«.

El juez Guillermo Scheibler

Scheibler destacó: «En nuestro fuero todas las sentencias están en un sitio de acceso público». Dijo además que «la relación con el periodismo es importante, y que lo fundamental es la mediatización; como así también, la existencia de un periodismo especializado que decodifique y ponga las cosas en su justo lugar».

La jueza Julia Correa

Por último Correa reclamó que el periodismo «sea criterioso en las formas de publicar sus notas; y no mostrar situaciones que afectan la intimidad o principio de reserva de una persona en tanto puede regir sobre ella el principio de inocencia».-