Magistradas y Magistrados participaron en la jornada «Juicio por Jurados, experiencia americana»
La charla organizada por la Unidad Consejero Dr. Alberto Biglieri y acompañada por el Centro de Formación Judicial, la Asociacion Argentina de Justicia Constitucional, y el Colegio Público de Abogados de la Capital Federal se realizó en el Auditorio de éste último, el pasado miércoles desde las 14 hs.
El presidente del Colegio Publico de Abogados de la Capital, Ricardo Gil Lavedra dió unas palabras de bienvenida al encuentro en un auditorio colmado, en el que se encontraban presentes la Vice Decana de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires, Silvia Nonna y los consejeros Alberto Biglieri y Juan Pablo Zanetta.
La charla contó ademas con la exposición del Presidente de la Corte Federal de Columbia de los Estados Unidos de América, Peter Messitte, quien se explayó sobre como funciona el juicio por jurados en Estados Unidos, su alcance y particularidades.
La consejera jueza Fabiana Shafrick inició su exposicion resaltando «en primer lugar celebro la realización de este encuentro fruto del esfuerzo mancomunado del Consejo de la Magistratura de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en especial a la Unidad del consejero Dr. Alberto Biglieri, al Colegio Público de Abogados de la Capital Federal , al Centro de Formación Judicial ubicado en el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y a la Asociación Argentina de Justicia Constitucional». Agradeció profundamente «la posibilidad de participar en esta jornada que convoca a tan destacados colegas y poder compartir esta presentación junto con Presidente de la Cámara de Apelación Penal de la Ciudad, Dr. Jorge Franza y con la bienvenida que nos diera el presidente de esta casa, Dr. Gil Lavedra».
«En este encuentro vamos a tener ocasión de escuchar a la Dra. Carla Cavaliere que es una jueza penal de destacada trayectoria en el ámbito de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y su juzgado ha sido sorteado para llevar a cabo el primer juicio bajo la modalidad de juicio por jurados y también vamos a tener el especial privilegio de escuchar al profesor y juez Dr. Peter Messitte que nos acompaña y a lo largo de su estadia en nuestra ciudad nos ha brindado generosamente sus conocimientos y sus experiencias en esta oportunidad, tambien», concluyó Schafrick.
Por su parte el Presidente de la Cámara de Apelación Penal de la Ciudad, Dr. Jorge Franza, comenzó su exposición contando que: «La incorporación de los jurados surgió como una forma de expresión democrática durante la participación ciudadana en la antigua Atenas en el año 462 A.C. Y con respecto a nuestro país en el periodo 1810-1819 se incorpora el juicio por jurados como expresión del sistema de gobierno representativo y republicano».
El camarista agregó que: «En la actualidad existen como dijo el Dr. Gil Lavedra diez provincias que ya aprobaron una ley que regula este tipo de juicios, Cordoba, Buenos Aires, Neuquen, San Juan, Chaco, Mendoza, Río Negro, Entre Ríos; Chubut y ahora la Ciudad de Buenos Aires con la sancion de la ley n.° 6.451».
«Como podemos observar este es un jurado de tipo anglosajón que es el que toma nuestra legislación, demuestra la confianza en el pueblo y crea las bases para arribar a una decisión final como consecuencia de una extensa deliberación llevada a cabo por personas que no resultan ser profesionales del derecho, los jurados deben intercambiar sus diferentes puntos de vista, comparten y reveen sus propias posturas frente a la opinión de los demás», concluyó Franza.
Quien llevará adelante el primer juicio por jurados en la Ciudad de Buenos Aires, Carla Cavaliere, empezó por recordar al ex consejero y juez Gustavo Letner “quien trabajó muchísimo por la sanción de la ley de Juicio por Jurados y no vió cumplida esa meta y que nos abandonó antes que la ley estuviese sancionada”.
Adentrándose en la exposicion la jueza subrayó que: «La primer audiencia constituye un desafío que implica llevarla adelante con catorce partes. Va a ser el primer juicio por jurados de la Ciudad de Buenos Aires y un juicio con ciertas complicaciones vinculadas con alto número de partes: está la fiscalía, cinco querellas y hay ocho personas imputadas ( siete de ellas por todos y una por acusación privada)».Contó ademas que «varias de las cuestiones que abordó el dr. Messitte están contempladas en la ley que se sancionó aquí 6.451 y que después fue reglamentada por la resolución setenta de este año del consejo de la magistratura de la ciudad de buenos aires».
«Les recuerdo que en el sistema procesal penal de la ciudad los jueces que llevan adelante la instrucción penal preparatoria, resuelven todas las cuestiones en esa audiencia de admisibilidad de prueba que no deban resolverse en el juicio, al juez de juicio que es diferente del de la investigación penal preparatoria le llega el caso con todas las cuestiones resueltas y con la prueba para ser producida en el juicio y ninguna información, no tiene hojas de expediente, no tiene nada absolutamente nada más que el requerimiento de juicio, el requerimiento de la querella si la hay y el acta de audiencia de admisibilidad de prueba», explicó la magistrada.
Sobre el proceso, la jueza explico algunas cuestiones como que: «Una vez acordados por las partes como hechos probados y durante el transcurso de las instrucciones se las deberá informar al jurado como ‘estos hechos los tienen que dar por probados’ y eso trabaja o funciona para hacer un juicio ágil y limpio que quiere decir un juicio donde no se vaya a producir ningún tipo de prueba que lleve a confusión, que sea dilatoria, que sea prueba superflua, darle dinamismo al proceso».
«La decisión de estas doce personas la tienen que tomar por la culpabilidad o por la no culpabilidad por unanimidad, basta que una de esas personas no acuerde con cualquiera de las decisiones para que se produzca el estancamiento del jurado, que si se produce una vez, se puede volver a repetir el juicio siempre que las acusaciones quieran seguir adelante con esto y también está facultado el juez por la anulación del veredicto por parte del juez cuando claramente no haya prueba, la fiscalía y las querellas frente a la absolución no tienen posibilidad de presentar una apelación y en el caso de las defensas está en la litigación de la prueba, el agravio», concluyó Cavaliere.
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